Alrededor de 10 000 migrantes, en su mayoría ciudadanos de Haití, acampan bajo el puente que conecta a México (Ciudad Acuña) con Estados Unidos (Del Río, Texas).
Ante ello, el alcalde de Del Río, Bruno Lozano, declaró el estado en emergencia y describió esta situación como «sin precedentes» y «surrealista». Asimismo, el gobierno de Estados Unidos tiene previsto volar de regreso a miles de haitianos. De acuerdo con la agencia de noticias Associated Press (AP), los vuelos comenzarán desde este domingo y podrían haber hasta ocho por día.
El campamento improvisado tiene pocos servicios básicos y algunos migrantes, que soportan temperaturas de hasta 37 °C, están regresando a México por suministros.
Debido a esta situación, se han construido refugios con juncos gigantes y muchos migrantes están usando el río para bañarse y lavar ropa. Cabe resaltar que la AP informó que inclusive han nacido dos bebés en este campamento.