Hoy nuestra ciudad, después de dos años de confinamiento, vuelve a celebrar la Semana Santa. Envueltos en un ambiente lleno de reflexión y tradición, desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección nuestra ciudad revivió las diferentes manifestaciones culturales que caracterizan su fervor y devoción en estas fechas.
Una de ellas y poco conocida y difundida, es la entrega de mazamorras en el Pueblo tradicional de Cerro Viejo, una tradición que tiene más de 100 años y que ha pasado de generación en generación, siendo su iniciadora la Sra. Aurora Murillo de Bernal, quien se preparaba días antes del Viernes Santo, para poder ofrecer la tradicional mazamorra morada a niños y vecinos del tradicional pueblo.
Hoy después de más de 100 años, los nietos y bis nietos siguen con esta tradición, iniciando desde muy temprano la mañana del Viernes Santo con la preparación de la mazamorra, a base de maíz morado, membrillos y guindones, para luego después de una oración en familia, dar inicio con la repartición, abriendo las puertas de su casa y recibiendo a cientos de vecinos, quienes reciben el cariño de la Familia Gaona Orozco, la Sra Ursula Quispe Carbajal, entre más familiares que se suman en este día.
Así como esta, son muchas las tradiciones y costumbres que se viven en estas fechas y que reflejan la entrega y fervor de nuestra gente en sus diferentes distritos y anexos, y nos lleva a la reflexión, además de mostrar la importancia de transmitir nuestras costumbres con los más jóvenes y niños, para sembrar en ellos no solo el amor por nuestra tierra, sino también con nuestro prójimo.
Por: Fiorella Valencia / Proyecto Memoria