En la región Arequipa se registra que contra el 59% de mujeres se han cometido actos de violencia, cuando el promedio nacional es 55% y ocupa el segundo lugar en casos de feminicidio con 12 mujeres asesinadas en lo que va del año, hecho que preocupa a las autoridades, pero también a muchos varones que han decidido formar parte del cambio y que buscan la erradicación de la violencia, formando parte del colectivo “Hombres por la igualdad”.
Este lunes, un grupo de varones asumieron el compromiso de luchar contra la violencia ante la presencia de la ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), Rosalina Tolentino Gamarra; el gobernador regional Rohel Sánchez Sánchez; la directora del programa nacional Aurora, Ana María Mendieta; el presidente de la Corte Superior de Justicia de Arequipa, César de la Cuba; el Defensor del Pueblo en Arequipa, Ángel Manrique, entre otras autoridades.
Colectivo “Hombres por la igualdad”
Según se informó, en Arequipa son 200 los varones voluntarios que forman parte del colectivo y que han decidido trabajar activamente por erradicar la violencia de género, por tener una sociedad más equitativa, con igualdad de derechos en busca de una mejor convivencia. El gobernador señaló que el cambio depende de toda la sociedad, comenzando por la educación en casa, por la crianza de los hijos, evitando la designación diferenciada de roles para cada integrante de la familia, ya que la violencia es un flagelo que lamentablemente se transmite de generación en generación y que es necesario erradicar pero tomando conciencia del daño que causa en las mujeres y las personas más vulnerables, como los niños o los ancianos.
En esta actividad, además de varones que brindaron su testimonio sobre el cambio de su comportamiento respecto a los roles que desempeñaban como parte de la sociedad, también hicieron un manifiesto mediante el cual se comprometieron a compartir y a apoyar las justas demandas de mujeres contra la discriminación de género.
Igualmente dijeron que denunciarán y manifestarán públicamente su rechazo y condena hacia cualquier forma de violencia de género y personas vulnerables, además de realizar acciones concretas para lograr una sociedad más justa, libre de prejuicios y el reparto de responsabilidades en la vida pública y privada, economía, trabajo, participación social, entre otros.
Escribe: Miguel Angel Farfán