El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, dio un ultimátum a la concesionaria Rutas de Lima para que finalice sus operaciones, sin embargo, el alcalde del distrito de Puente Piedra, Rennán Espinoza, pidió un pronunciamiento sobre la situación del silencio en que se mantiene el burgomaestre.
Se vienen realizando plantones frente a la garita de Chillón, dirigidos por un grupo de vecinos, exigiendo el fin del cobro de peajes. Entre los manifestantes también se encuentra el alcalde distrital Espinoza.
“Lo que queremos es que el alcalde de Lima nos dé una explicación. Ya estamos 1 de agosto y no dice nada. Queremos saber cuál es su estrategia jurídica. No sabemos nada del alcalde, ni a través de los medios de comunicación”, manifestó.
El último 25 de julio, Rafael López Aliaga invocó al consorcio Rutas de Lima a “devolver” lo que él llamó “los peajes de la corrupción”.
Se estableció un plazo, dirigido por el alcalde, hasta el 29 de julio a las 12 de la noche, para que la empresa acatara su solicitud o en caso contrario apelaría a “un proceso totalmente legal” como parte de una estrategia de la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML).
Dos días después, la empresa emitió un comunicado en el que resaltó que existe una controversia sobre el tema ante el Tribunal Arbitral internacional y que no se puede desconocer la medida cautelar dictada por dicha instancia a favor de Rutas de Lima.
El pasado 20 de enero, el concejo de la MML aprobó de manera unánime terminar de manera anticipada con el contrato con el Consorcio Rutas de Lima. Dentro de los argumentos señalados, se enumeró las altas tarifas de peajes, la deficiencia del servicio, por las consecuencias sobre el tránsito sobre las vías y la afectación al desarrollo de los sectores de la población que viven en los alrededores.
