La situación de Alejandro Soto, titular de la Contraloría General de la República, se complica aún más. El Contralor Nelson Shack anunció en una conferencia de prensa que la institución también ha tomado medidas con respecto a la presunta acusación de nepotismo que involucra a Soto. Se alega que contrató a la hermana de su expareja en su despacho. Esta nueva denuncia se suma a los procedimientos éticos que ya se han iniciado en la comisión de Ética en contra del presidente del Congreso.
“Estamos al tanto de esta situación. Hemos intervenido en ella. La investigación está en curso, pero es confidencial por el momento. Es evidente que hay un problema moral y ético que debe ser esclarecido en las instancias adecuadas. La Contraloría cumplirá su rol, y este no es únicamente un problema del Congreso”, afirmó Shack durante su entrevista con TV Perú.
Shack también explicó que la Contraloría ha designado un equipo para investigar el caso y esclarecer los hechos que han salido a la luz en los medios de comunicación. La intención de la Contraloría es cambiar gradualmente su enfoque reactiva a uno más proactivo, utilizando análisis de datos para prevenir situaciones como esta en el futuro.
La acusación de nepotismo es una preocupación seria, ya que plantea cuestiones éticas y morales en el contexto de la gestión pública. La Contraloría está comprometida en llevar a cabo una investigación minuciosa y justa para determinar la veracidad de estas acusaciones y tomar las acciones adecuadas en consecuencia.
