Goyo Gutiérrez Quispe, un interno que cumple una condena de 12 años por robo agravado en el penal de Qencoro en Cusco, ha recibido una sentencia adicional de 3 años y 2 meses por matar a una perrita.
Este cruel acto ocurrió en marzo de 2020 en el establecimiento penitenciario cuando Gutiérrez apuñaló al animal y luego lo arrojó en un cilindro. El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) adoptó al perrito para que fuera cuidado junto con otros en el lugar.
Durante la investigación, Gutiérrez confesó que atacó a la perrita “por placer”, lo que resultó en su denuncia por abandono y actos de crueldad contra animales domésticos y silvestres. Tras más de tres años de investigación, finalmente fue sentenciado por este delito.
Además de la pena de prisión, Gutiérrez deberá cumplir 163 jornadas de servicio comunitario y pagar una reparación civil de 500 soles. El tribunal también ordenó que se le prohíba definitivamente la tenencia de animales.
