En su primera entrevista a un medio desde que asumió el cargo, Gustavo Adrianzén, nuevo jefe de la PCM, abordó la lucha contra la corrupción, describiéndola como un problema arraigado y normalizado en el país.
Asimismo, destacó la importancia de dos pilares de acción: la reactivación económica y la generación de confianza.
Adrianzén enfatizó también que la confianza se gana difícilmente y se pierde fácilmente cuando se traiciona la palabra.
“Una parte fundamental para generar confianza tiene que ver con la seguridad ciudadana y la lucha contra la corrupción. Con respecto a esto último, es un mal estructural, endémico. He pensado y siento como si nos hubiésemos encallecido respecto a la corrupción, como si la hubiéramos normalizado. Es normal un poquito de corrupción”, agregó.
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