Crisis hídrica en Arequipa: 35 infraestructuras de agua potable en riesgo por lluvias intensas

Lluvias en Arequipa ponen en riesgo 35 infraestructuras de agua potable. Sunass alerta sobre desabastecimiento y urge medidas preventivas.
Crisis hídrica en Arequipa
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Las lluvias intensas en Arequipa han encendido las alarmas por el riesgo extremo que enfrentan 35 infraestructuras de saneamiento en áreas urbanas, rurales y pequeñas ciudades. Según el Centro de Monitoreo y Análisis de la Información de Agua Potable (Camiyaku) de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass), esta situación podría comprometer el acceso al agua potable de miles de usuarios en la región.

El riesgo más alto se concentra en pequeñas localidades:

Saúl Alire Benavides, jefe de la oficina desconcentrada de Sunass, explicó que el mapa de riesgos actualizado muestra que 15 prestadores de servicios de pequeñas ciudades y áreas rurales se encuentran en alerta máxima (nivel 4). Estas localidades, que representan el 4,5% del total de infraestructuras de saneamiento en Arequipa, incluyen zonas como Achoma, Viraco, Yanque, Cabanaconde y Callalli, entre otras.

Corte del servicio y desabastecimiento:

En el distrito de Yura, la activación de quebradas ha colapsado canales de riego, lo que llevó al cierre de tres plantas de agua operadas por las Juntas Administradoras de Servicios de Saneamiento (JASS) en Yura Viejo, Uyupampa y Quiscos Morroverde. Este incidente dejó a más de 306 usuarios sin agua potable, obligando a la municipalidad a distribuir el recurso mediante camiones cisterna.

Zonas con riesgo fuerte:

Además, 13 prestadores y 20 sistemas de agua potable enfrentan un nivel de alerta fuerte (nivel 3), lo que representa el 23,5% de los sistemas de uso poblacional. Las zonas afectadas incluyen Pampacolca, Sibayo, Alca, La Calera, Polobaya y las captaciones del río Chili.

Un llamado a la acción:

La Sunass ha pedido a las autoridades municipales y líderes comunales que mantengan una vigilancia constante sobre estas infraestructuras y notifiquen cualquier daño de inmediato. “La prevención y una respuesta rápida son cruciales para minimizar el impacto en el acceso al agua potable de la población”, señaló Alire Benavides.

La lucha contra la crisis hídrica:

Esta situación evidencia la vulnerabilidad de las infraestructuras de agua potable frente a fenómenos climáticos extremos, y pone en debate la necesidad de reforzar las medidas preventivas y mejorar los sistemas de saneamiento en las zonas más afectadas.

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