Con 85 votos a favor, el pleno del Congreso aprobó la nueva ley que establece procedimientos para el rastreo, bloqueo y baja de celulares usados en actividades ilícitas. Esta medida busca fortalecer la lucha contra el crimen organizado y el uso de tecnología para cometer delitos.
La legislación, que modifica los decretos legislativos 1182 y 1338, otorga a las autoridades competentes la facultad de suspender líneas telefónicas, bloquear el código IMEI (que identifica a cada dispositivo móvil) y dar de baja el servicio móvil cuando se demuestre su vinculación con actividades delictivas.
Patricia Juárez, vicepresidenta del Congreso, explicó que la ley tiene como objetivo “precisar la identificación, localización, geolocalización y rastreo de terminales móviles“, para facilitar la suspensión de líneas telefónicas, el bloqueo del IMEI y la desactivación del servicio en casos donde los dispositivos sean utilizados para cometer delitos, como extorsión, fraudes o amenazas.
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Una de las disposiciones clave de la norma es la creación del Registro Nacional de Equipos Terminales Móviles para la Seguridad, cuyo propósito será combatir el comercio ilícito de dispositivos, en especial los celulares robados o de origen dudoso.
Esta aprobación se dio en el marco de una sesión plenaria dedicada a la seguridad ciudadana, en la que se subrayó la importancia de actualizar las herramientas legales para enfrentar los delitos cometidos mediante el uso de la tecnología móvil.
Con esta ley, se espera aumentar la eficacia de las autoridades en la lucha contra el crimen, garantizando una respuesta más rápida y efectiva en la identificación y bloqueo de equipos involucrados en actividades ilícitas.
