Hace un año, la Municipalidad Distrital de Yura ordenó la destrucción de la poza de Quiscos argumentando que generaba riesgos sanitarios para la población que vive en la parte baja de la zona.
La gran cantidad de personas que llegaba a la poza de aguas termales hecha por los mismo visitantes se hizo visible con la gran cantidad de basura que se recogía.
La Autoridad Autónoma de Agua (ANA), archivó el proceso sancionador en contra del municipio de Yura por intervenir la zona con maquinaria pesada en enero del 2020.
Recordemos que la comuna Yureña había sido sancionada con el pago de 12 UIT por la destrucción de esta poza, sin embargo, la resolución emitida por el ANA indica que el cauce de la quebrada de Quiscos no fue afectada por el municipio ya que anteriormente había sido modificada por terceros para usar las aguas termales.
El alcalde de Yura, Néstor Chicaña Nina, señaló que no se ocasionó daños a las aguas termales y solo se intervino las áreas usadas en condiciones insalubres y que además habían personas que cobraban por el ingreso.