La Fiscalía culminó la investigación preliminar del caso y procedió a formalizar la denuncia, por lo que las tres menores de edad presuntas autoras del asesinato de la cuidadora del albergue CAR Isabel II afrontarán el pedido de internamiento preventivo por dos meses, tiempo donde se culminará con la investigación.
«Tenemos suficientes elementos probatorios y en menos de dos meses, debemos tener una sentencia que determine la responsabilidad o no de estas adolescentes», declaró Yenny Vargas Mamani, fiscal de familia de turno del Módulo de Justicia de Paucarpata.
El 28 de septiembre en horas de la tarde, el personal de Homicidios de la Policía intervinieron en el sector de Secocha en la provincia de Camaná a la tercera implicada en la muerte de Shirley Cusilayme, cuidadora del albergue CAR Casa Isabel II.
Como se recuerda la muerte de la cuidadora fue reportado a la Policía el pasado domingo en horas de la noche, la joven cuidadora de 30 años fue hallada maniatada de manos y pies y murió a causa de asfixia. El terrible hecho lo habría ocasionado tres jóvenes de 15 años, que pertenecen al albergue donde la cuidadora las atendía en el turno de la noche. Luego del hecho las tres jóvenes huyeron del lugar.
De inmediato se procedió a buscar a las implicadas, dando con el paradero de dos de las tres implicadas en Camaná, cuando ambas menores pretendían irse a Ocoña por el sector conocido como Urasqui. Las menores fueron halladas con S/500 y un celular de alta gama, que le habrían quitado a la cuidadora luego del terrible hecho.
Testimonio de tercera implicada es importante
Las dos menores intervenidas el pasado lunes, indicaron a la Policía que no tenían la intención de matar a la cuidadora y que fueron convencidas por la tercera implicada que se encontraba desaparecida.
El jefe de la Divincri, comandante Marcos Cuadros, señaló que las niñas solo querían escapar. El testimonio de la tercera implicada será importante para determinar las causas de su muerte.
Último adiós
La cuidadora recibió el último adiós por parte de sus familiares y amigos el día 28 de septiembre en horas de la tarde. La trabajadora social fue esnterrada en el cementerio La Apacheta.
Shirley era una mujer muy querida por sus familiares, a quienes apoyaba económicamente y era el sustento del hogar, por sus parte sus amigos la recuerdan como una persona dedicada a su trabajo y que estaba presta a ayudar a otros.
Familiares y amigos piden justicia para la joven, que murió en condiciones muy violentas. Este es el segundo caso reportado en este albergue. El primero fue en julio cuando una cuidadora, habría asfixiado a una niña de 12 años por negligencia.