La Comisión Europea atribuyó a cada Estado la decisión de inmunizar a su población con una tercera dosis de la vacuna contra la COVID-19. Para ello, pidió tener en cuenta las evidencias científicas; siendo así, Alemania, Francia y Reino Unido anunciaron una nueva ronda de vacunaciones en septiembre.
No obstante, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo la petición moratoria a los países más desarrollados de donar sus dosis, apelando así a la solidaridad con los países más pobres, dado que sus habitantes son los más expuestos y vulnerables durante la pandemia.
Hasta el momento, África tiene solo el 1.58 % de su población vacunada; ante ello, respaldaron el mensaje de la OMS.
«Nuestra posición es clara. Necesitamos vacunar a tanta gente como sea posible con las vacunas disponibles antes de empezar a mirar hacia dosis de refuerzo», indicó el director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (África CDC) de la Unión Africana, John Nkengasong.
Por otro lado, compañías, como Moderna, apuestan por una tercera dosis, debido al incremento de contagios provocado por la variante Delta.
«Creemos que un refuerzo probablemente será necesario este otoño [hemisferio norte], particularmente debido a la variante Delta», señaló la empresa estadounidense.