La señora Rosa es una micro empresaria y se dedica a vender ropa en una galería en la calle Perú, en el Cercado. Hoy salió a marchar pidiendo que la dejen trabajar ya que tiene deudas que pagar e hijos que alimentar. Desde el lunes no pudo abrir su negocio debido al confinamiento que rige en Arequipa hasta fines de febrero.
“Los bancos siguen cobrando, los intereses siguen subiendo si no pagamos. No les pedimos bonos, queremos que nos dejen trabajar”, dijo mientras marchaba en la Plaza de Armas de Arequipa.
Cientos de pobladores mostraron su rechazo a la cuarentena focalizada que el Gobierno dictaminó para Arequipa hasta el 28 de febrero. Miles de negocios se vieron obligados a cerrar y cientos de familias se vieron afectadas sus economías.
Salieron a marchar comerciantes de distintos centros comerciales del Cercado, de la plataforma comercial Andrés Avelino Cáceres, de Río Seco, de Mariscal Castilla y también se sumaron en el Cono Norte.
El secretario general de la Federación Departamental de Trabajadores de Arequipa, José Luis Chapa, anunció un paro regional de 24 horas antes del 28 de febrero.