Arequipa enfrenta aumento de incendios forestales

El Servicio Nacional Forestal reporta 35 incendios en la región, con un llamado urgente a prevenir quema de rastrojos y desechos agrícolas.
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Luis Felipe Gonzales, administrador del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR), informó que hasta el momento se han registrado 35 incendios forestales en la región de Arequipa, afectando cerca de 1,400 hectáreas de terreno. El último incendio ocurrió ayer en el distrito de Puquina, en la provincia de Sánchez Cerro, una zona colindante con el distrito de Polobaya en Arequipa. Este incendio ya ha sido controlado en su totalidad.

Gonzales advirtió que estamos entrando en el periodo pico de incendios forestales, que suele intensificarse entre agosto, septiembre y octubre. Hasta ahora, en agosto se han registrado 35 incendios, y se prevé que el año cierre con un promedio de 60 incendios. “Es una situación delicada,” destacó Gonzales, subrayando el aumento significativo en comparación con años anteriores.

Prevención

El administrador hizo un llamado a la población y a los agricultores para evitar la quema de rastrojos y desechos agrícolas, una práctica que, contribuye significativamente a la ocurrencia de incendios. En particular, señaló que en agosto se observa un incremento de incendios debido a las quemas asociadas a pagos a la tierra. Gonzales recordó el gran incendio de 2018, que afectó 1,992 hectáreas y tuvo su origen en un pago a la tierra en el anexo de Talamolle, cercano a Polobaya.

Enfatizó que actividades humanas, ya sean directas o indirectas, han causado todos los incendios forestales registrados hasta la fecha. Arequipa lidera las estadísticas de incendios forestales, con los distritos de Chiguata y Pocsi a la cabeza, seguidos por las provincias de La Unión, Condesuyos, Caylloma y Castilla.

Gonzales también advirtió sobre las condiciones climáticas que agravan el riesgo de incendios, como el viento fuerte en agosto y el aumento de temperaturas en los próximos meses. “Llamamos a los agricultores a extremar precauciones, ya que la pradera seca se vuelve más vulnerable a los incendios,” concluyó.

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