César Príncipe es el vocalista de la banda limeña Cardenales, una de las agrupaciones más reconocidas del new wave peruano que este año cumple 35 años de trayectoria. Con discos reconocidos como “El Tiempo” y “Tormenta Silenciosa“, el grupo que César lidera se ha convertido en referente para otros conjuntos que vinieron después.
En esta oportunidad, lo entrevistamos y nos habló sobre su trayectoria musical con Cardenales y algunas reflexiones por estos 35 años de carrera.
¿Cómo consideras que han pasado estos 35 años de carrera con Cardenales?
Se ha pasado todo como un santiamén. Ha sido muy rápido. Lo bueno de Cardenales es que no nos hemos vuelto una banda que se negó a los cambios tecnológicos. Siempre hemos ido a la vanguardia. Usamos las herramientas que nos da la tecnología para hacer música. A pesar de ser una banda netamente guitarrera, tenemos pistas y teclados que aportan más a nuestro sonido.
¿Tú crees que Cardenales influyó en bandas que vinieron después?
En realidad, el objetivo de la banda siempre ha sido dejar una enseñanza o legado a las nuevas generaciones. Conocemos grupos -más que todo en regiones- de new wave y pop que se identificaron con nosotros. Por ejemplo, en Ica están Sandra y el Delator; en Huancayo, Rüe Morgue 131; en Lima, Rawa; y más bandas que cuando las conocimos más directamente nos dimos cuenta de una conexión con Cardenales. Eso es bueno, porque uno siente que hay una nueva generación que está empujando los cambios. Hay un nuevo surgimiento de la música pop, no solo en las regiones que te nombré, también en Arequipa aunque no estoy al tanto de la situación actualmente de allá, ya que conozco Fobya y a Edy Estrada. Fácil y también hay en otras como en Ayacucho, la selva, etc. Creo que la pandemia nos ha servido para aprender varias cosas, y haber sobrevivido ya es bastante.
¿Cuál es tu disco favorito de Cardenales?
Cuando uno es músico, las producciones son como sus hijos. Yo considero que “El Tiempo” es el disco más maduro de Cardenales. Justo es el último disco, ya que después de ese salen solo singles para ir con la vanguardia de las bandas extranjeras. Más bien, estas canciones se recopilarán en un nuevo álbum llamado “Huracán”, que verá la luz el próximo año. Ya las hemos acabado, y no solo tiene temas anteriores, sino que también tiene otras nuevas como “Hoja Seca”. Cuando saquemos “Huracán”, grabaremos un EP con los temas nuevos, que no se tocarán en vivo hasta haber sacado este material.
¿Entonces “Huracán” será un disco mitad recopilatorio, mitad con canciones nuevas?
Exacto. Lo que pasa es que los singles nunca han estado en una producción, por lo que los vamos a inclurir. El siguiente EP que sigue tendrá las canciones nuevas, que no vamos a tocar hasta que salga ese EP al aire.
Tanto con estas canciones nuevas, como con las antiguas ¿En que te inspiras para componer?
Como decía Cesar Vallejo, “la inspiración viene del pueblo y va hacia él”. Yo me inspiro cuando una persona me cuenta una historia; yo la plasmo con letra y música. De repente puedo conversar contigo después, y si tu me cuentas una historia y me parece sumamente interesante, uno adquiere profundidad en un tema y las escribo, cosa que le pasa a varias personas. Normalmente son cosas reales de gente que conocí en el camino.
Ahora referente al sonido de las canciones ¿El tipo de música de tus temas es por algo que tú escuches, tus ánimos u otras cuestiones?
Las canciones se plasman de acuerdo al estado anímico de uno. Si encuentras una historia que coincide con el estado de ánimo en el que te encuentras, será un éxito. El tema es conocerse psicológicamente para coincidir en hacer una canción que sea contundente, por juntar clímax. Si ves una historia que te gustó, y esa historia producía la misma sensación que tenías al momento de escribirla, entonces todo fluirá más fácilmente.
¿Crées que es más fácil crear una banda hace años o actualmente?
Yo creo que ahora es más fácil que antes. En el ’87-’88, nosotros vivíamos en Jesús María, pero el tecladista -en ese momento era Johnny Cerrón, quién después fue reemplazado por Víctor Hugo Cerrón- vivía en Naranjal (Los Olivos). En esa época, irse de Jesús María a Naranjal, era lejísimos. Nosotros nos ‘vacilabamos’. Por ejemplo, había una reunión para quedar ensayos, y si el tecladista no iba, había que ir hasta Naranjal, ir a su casa y dejarle una nota. Le decíamos eso, pero de todos modos él siempre estaba en esos ensayos. Otra dificultad que había era en las comunicaciones, ya que no teníamos una importación de instrumentos. Los grupos querían sonar mejor, y en la música siempre salen versiones nuevas de los instrumentos cada dos o tres meses, y eso nos atrasaba. En el caso del rock argentino, debido a lo que sucedió en Las Malvinas, solo escuchaban rock argentino. En el Perú pasó todo lo contrario, ya que tanto antes como ahora las radios arriesgan poco al poner música peruana. Aparte, antes no todos tenían su propio instrumento, ni iban puntuales. Las comunicaciones y la tecnología han hecho que ahora salgan más grupos. También la tecnología apoyó, porque ahora hay homestudios, ya no es necesaria las consolas enormes de antes.
Yendo al género que tu representas, que es el post punk y el new wave ¿Tú cómo crees que se ha llevado con el paso del tiempo?
En la escena, cuando recién comenzó, salieron grupos que ahora son leyendas como Lima 13 y Voz Propia. Ahora han continuado algunas bandas con ese legado. Nosotros salimos de ahí, somos de la promoción de Lima 13, con quienes tocaremos en nuestro concierto de 35° aniversario el próximo 7 de diciembre. Hemos querido siempre andar en bloque para sacar cosas más rápido. Lamentablemente, hubo bandas que se quedaron en el camino. Por eso siempre estuvimos solos entre comillas, porque en los shows nos hemos solidarizado con grupos, así como ellos con nosotros.
Antes comentaste sobre que Cardenales se estaba incluyendo en las nuevas tecnologías ¿Tú como crees que estas repercutan en la industria musical?
Que buena pregunta. Yo creo que Spotify, o las plataformas para dar a conocer tu música han sido fatales, porque si subes tus canciones solo, pero sin una casa editora que te respalde o te de soporte para el tema de las regalías, te quedas en el limbo. Hay artistas como Mario Silvania, que prefiere vender sus canciones por teléfono por las inconformidades con las plataformas. Nosotros trabajamos con una casa que nos representa frente a Spotify, Youtube y las demás plataformas (Altafonte). Cuando nadie nos representaba, no pagaban a tiempo, y si recibíamos nos ponían ‘al final de la cola’. Aparte que no ganas casi nada, son 40 soles. Haces un esfuerzo hazañoso, y prácticamente no recibes nada. Sobre eso, prefiero lo de antes, los discos físicos. A nosotros, las bandas independientes, las plataformas no nos han favorecido en nada.
Referente a lo último ¿Entonces prefieres los discos, vinilos, etc?
La verdad que sí. Hay gente que si compra las producciones en físico. Y aprovechando eso, decir que en el concierto por el 35° aniversario de Cardenales venderemos el disco de vinilo de “El Tiempo”.
¿Crees que hay un apoyo a los artistas por parte de instituciones públicas y privadas?
Eso lo hemos hablado internamente. La verdad es que las productoras que contratan artistas internacionales, los compran para que la gente vaya, pero el tema es que compran, compran y compran, pero nunca venden. No hay ninguna productora que coloque bandas en el extranjero. Eso es contraproducente para todos los grupos que están saliendo. No solo se trata de vender a las bandas nacionales en el Perú, sino que también en el extranjero. Por otro lado, el Ministerio de Cultura recién está dando a conocer unas inversiones para los grupos nuevos que recién han salido, y si bien es cierto, hay bandas que si se lo han merecido, como Anjali o Catervas, hay otros que se presentaron y no tienen ni seis meses haciendo música, lo que si me parece mal. Esperemos que con la nueva adminsitración, las cosas cambien para bien.
Por Orlando Cáceres Vides.
Fuente: Entre Líneas Cultura.
