El Área de Conservación Regional Huaytapallana, ubicada en Junín, fue cerrada de manera indefinida tras una decisión unánime del Consejo Regional. Se trata de una medida sin precedentes, impulsada por la alarmante pérdida del 70 % de su masa glaciar y el riesgo inminente de aludes.
El cierre definitivo busca frenar el deterioro acelerado de esta reserva natural, clave para la regulación hídrica del valle del Mantaro y la ciudad de Huancayo.
De acuerdo con el informe de la Gerencia de Recursos Naturales, el equilibrio ecológico está en grave riesgo.
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El INAIGEM respaldó la medida, advirtiendo que el retroceso del glaciar va en aumento y que la actividad humana debe limitarse con urgencia para evitar un colapso ambiental.
A partir de este mes, toda presencia no autorizada estará prohibida. Se han instalado puestos de control y un equipo técnico vigilará las zonas más frágiles del ecosistema.
Las sanciones para quienes infrinjan la norma pueden incluir medidas administrativas y penales.