El jueves 2 de febrero, Cusco amaneció con piquetes en diversas calles y distritos de la región. Tal como lo anunciaron, los transportistas del servicio urbano cesaron sus actividades en su totalidad. Esto como una medida radicalizada de protesta en contra de la presidente Dina Boluate.
Anteriormente, los dirigentes transportistas de Cusco anunciaron que han tomado la firme decisión de que el 2 de febrero, radicalizarán su medida de lucha. Realizarán esto a través de un ‘paro seco’ en la ciudad. Por ello, paralizaron el 100 % de sus actividades, mientras que taxis y colectivos operan evadiendo los piquetes.
Además, los mercados del centro están cerrados y sus trabajadores se alistan a realizar una movilización. Mientras que se prevé el arribo al Cusco de manifestantes provenientes de varias provincias para las movilizaciones.
En la avenida El Sol donde se encuentran la mayoría de instituciones públicas y privadas se ve desolada, bancos y algunas oficinas de la municipalidad atienden con relativa normalidad, pero a puertas cerradas.
Por su parte, la Policía Nacional aumentó el resguardo en las vías que conducen al aeropuerto internacional Alejandro Velasco Astete, para evitar la toma de este.
