El Jefe de la Oficina Defensorial de Arequipa, Ángel Manrique, se ha pronunciado respecto a las protestas anunciadas para el 27 de julio. Manrique destacó que las manifestaciones son un reflejo de la crisis que se ha agudizado debido a las distancias sociales y políticas en el país, sumado al sentimiento de abandono que algunas regiones, como Arequipa, sienten por parte del centralismo en Lima.
Para evitar una mayor fragmentación social, Manrique resalta la importancia del diálogo como herramienta fundamental para superar las brechas sociales y encontrar soluciones a las demandas de la población. Considera que las protestas son legítimas y que el Gobierno debe escuchar y atender estas necesidades para acercar posturas y buscar soluciones conjuntas.
Respecto al mensaje de la presidenta Dina Boluarte para el 28 de julio, Manrique prefirió no referirse a un pedido personal y, en cambio, instó al Gobierno a atender las múltiples demandas de Arequipa y trabajar en la reducción de las distancias sociales y políticas para un país más unido.
Defensoría garantiza vigilar las protestas
La Defensoría del Pueblo estará vigilante durante las protestas del 27 de julio, asegurándose de que se desarrollen de manera pacífica y sin afectar el desfile cívico-militar que tendrá lugar en la avenida Independencia. Con un enfoque en el diálogo y la vigilancia, la Defensoría busca contribuir a un ambiente de entendimiento y respeto en medio de las manifestaciones, promoviendo el respeto de los derechos ciudadanos y la búsqueda de soluciones colectivas.