En un reciente reportaje de investigación, se ha expuesto que trabajadores del congresista Alejandro Soto, actual presidente del Congreso y miembro de Alianza Para el Progreso (APP), estarían utilizando parte de sus salarios para financiar campañas de publicidad en redes sociales en beneficio del legislador.
El programa de televisión “Cuarto Poder” reveló intercambios de mensajes que sugieren que los empleados del parlamentario de la región Cusco realizarían contribuciones mensuales, denominadas “cuotas voluntarias”, destinadas a sufragar los costos de publicidad en plataformas como Facebook.
En uno de los chats compartidos, se menciona: “Phenélope, acabo de enviarte mi cuota voluntaria para la publicidad de la página de Facebook del mes de septiembre y octubre”.
Este financiamiento, según el informe, aumentaría la visibilidad de noticias favorables al congresista en cuestión, otorgándoles un mayor alcance y, por ende, más visibilidad ante el público.
Trabajadores usan cuentas falsas en redes sociales
No obstante, la investigación no se detiene ahí. También se alega que los trabajadores del congresista Soto emplearían cuentas falsas en Facebook para mitigar la percepción negativa hacia él. Dicha tarea habría sido encomendada a Edgar Gamarra, un exreportero ahora vinculado al despacho del congresista.
Los mensajes filtrados sugieren que Gamarra monitorea comentarios en el antiguo programa de Soto, ‘Ronda Política’, y coordina la respuesta ante críticas. “Phenélope, esto están comentando en la página Ronda. Y siguen los troles, pero seguiremos eliminando. Estoy alerta”, se menciona en uno de los chats.
La asesora principal de Soto, Sandra Rodríguez, insta a los empleados a replicar con sus propias cuentas y con las de sus familiares para contrarrestar las críticas en la página de CTC, sugiriendo que se utilicen cuentas falsas si es necesario.
Este reportaje ha generado cuestionamientos sobre la ética y la transparencia en el uso de fondos y recursos públicos, así como sobre la autenticidad y la integridad de la interacción en línea. La polémica suscitada pone en el centro de atención la relación entre los políticos y las redes sociales, y cómo esta dinámica puede influir en la percepción pública y la opinión ciudadana.