Noelia Ruiz nació en el Hospital de Vall d’Hebron el 14 de diciembre de 1997 a los 6 meses de embarazo, pesando apenas 800 gramos.
En ese entonces, el hecho fue calificado como «peligroso» por el jefe de Neonatología del nosocomio, Félix Castillo, porque «la mayoría de niños que nacían a las 24 semanas morían».
No obstante, el médico destacó que el hecho que Ruiz sobreviviera, fue una gran noticia, por «su fortaleza, sus ganas de vivir, su genética y, posiblemente, por ser mujer».
El reencuentro
Hace unas semanas, Castillo despacho a una joven auxiliar de enfermería, que está en el último curso. Ella había entrado a trabajar en el hospital infantil, por lo que el médico no la reconoció.
Más tarde, se reveló que era la niña a la que le había salvado la vida hace 24 años y ahora, trabajaba en el mismo edificio de Vall d’Hebron donde nació.
Noelia Ruiz relató que al momento de saber que el doctor Castillo trabajaba en el mismo edificio que ella, decidió «llamar a la puerta de su despacho para autopresentarse».
Tiempos diferentes
Entre tanto, Félix Castillo reconoció que la joven «no solo ha sobrevivido, sino que además no tiene secuelas graves», algo que le dejó «totalmente perplejo».
«En aquella época, hace 24 años, no teníamos los mismos respiradores, incubadoras, conocimientos o herramientas que tenemos ahora, pero con lo que disponíamos lo hacíamos lo mejor que sabíamos», manifestó el neonatólogo.
Inspiración
Ruiz decidió estudiar en el campo de salud como enfermera tras su prematuridad, la cual considera como «siempre fue algo importante»
«Trabajo en el Servicio de Nefrología Pediátrica y en el de Oncohematología, y me gusta mucho, soy feliz. En un futuro, al acabar enfermería, me gustaría cursar un máster en pediatría o neonatología, todavía no lo tengo claro», señaló la joven.
