La Gerencia Regional de Comercio Exterior y Turismo (Gercetur) del Cusco ha emitido una alerta urgente instando a los turistas locales, nacionales y extranjeros a abstenerse de visitar la famosa montaña de Siete Colores, conocida también como Vinicunca, debido a un conflicto social latente que ha derivado en enfrentamientos violentos.
En un comunicado oficial, Gercetur ha solicitado a los operadores de servicios turísticos que eviten exponer la seguridad de los visitantes y prioricen su integridad. Esta recomendación aplica tanto para la ruta de Cusipata como para la de Pitumarca, las dos principales vías de acceso a este popular destino.
A través de la Red de Protección al Turista, la entidad ha emitido la alerta correspondiente y ha asegurado que se encuentran en constante monitoreo junto a las autoridades locales y las fuerzas del orden del distrito de Cusipata, en la provincia cusqueña de Quispicanchi.
Además, han hecho un llamado a la calma a los habitantes de las comunidades afectadas, señalando que “las decisiones unilaterales y los intereses individuales no conducen a un buen desarrollo o progreso de una sociedad, por el contrario, solo generan disturbios; la violencia no es la solución”.
Saul Caipani, gerente regional de Turismo de Cusco, informó que los recientes enfrentamientos entre las comunidades de Chillihuani y Llacto han dejado un saldo trágico de tres personas heridas y un varón fallecido.
La Policía Nacional y el Ministerio Público ya se encuentran en la zona para investigar y controlar la situación.
El conflicto, que ha resultado en hechos de sangre durante más de una década, sigue sin ser resuelto por las autoridades y afecta a varias comunidades, incluyendo Chillihuani, Tintinco, Paucarpata y Llacto, que se disputan la administración de la montaña.
Entre el 7 y el 8 de agosto, representantes del Parlamento Andino, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), alcaldes, subprefectos y miembros de la comunidad mantuvieron reuniones para buscar soluciones a la disputa.
Sin embargo, el pasado 8 de agosto, los representantes y el asesor legal de Chillihuani se retiraron abruptamente de la mesa de diálogo, decidiendo unilateralmente reabrir el acceso a la montaña, lo que llevó a Gercetur a emitir un nuevo llamado a los turistas y operadores a evitar “los condicionamientos y caprichos e intereses económicos difusos” de las comunidades en conflicto.
