El presidente de la Red de Albergues de Arequipa, Volker Nack, manifestó que los menores llegan a los albergues por diferentes motivos, tales como: violencia sexual, desprotección o abandono familiar. Ellos terminan en los refugios por medio de un mandato judicial, sea del Poder Judicial o del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.
Nack declaró que cerca de un 40 % de los niños viene con secuelas propias de la violencia padecida.
Asimismo, el representante reveló que en Arequipa se cuenta con 30 albergues, los cuales cobijan entre 1000 y 1200 infantes; desde recién nacidos hasta ciudadanos de 18 años.
El presidente comunicó que ha disminuido el ingreso de niños en condición de abandono. Esto se debe a la situación sanitaria, pues no se han atendido todas las emergencias. Muchos casos no fueron denunciados.
«La violencia ha sido más escondida en casa», puntualizó Nack.
Por otro lado, señaló que cuando los menores cumplen la mayoría de edad, se da por terminado el compromiso legal. Empero, el vínculo moral sigue; incluso algunos jóvenes optan por quedarse más tiempo en estos centros y recibir apoyo para integrarse en la sociedad.
