Terrible. El caso del joven que había denunciado haber sido secuestrado y quemado por delincuentes en El Pedregal era falso. Antes de morir, el varón confesó a la Policía que él mismo se roció gasolina y se quemó.
El pasado 11 de agosto, el estudiante Víctor P. T. (26) denunció que fue secuestrado por dos sujetos por las inmediaciones de San Lázaro —Cercado—. El habitante indicó que lo llevaron a un cuarto en El Pedregal, donde, señaló, le habrían robado y, posteriormente, quemado.
A raíz de ello, el joven fue llevado al Hospital Honorio Delgado Espinoza. Él presentada quemaduras de segundo y tercer grado en gran parte de su cuerpo.
El estudiante también declaró a la Policía que había ganado una beca para irse a estudiar a Canadá, lo cual también resultó ser una mentira, pues la PNP cruzó la información y descubrió que no existía ninguna beca.
El 19 de agosto, lamentablemente, el joven falleció a causa de las terribles quemaduras. Antes de morir, este señaló que nunca fue secuestrado, contando que él mismo se roció gasolina y decidió acabar con su vida por, según confesó, tantas mentiras y gastos que le ocasionó a su madre.
Las primeras versiones que dio el estudiante a la Policía generaron que muchas personas pidan justicia por el estudiante. Sin embargo, finalmente, se descubrió que todo era mentira y que él mismo decidió terminar con su propia vida.