La administradora del mercado San Camilo, Patricia Ramos, dio detalles sobre la situación del establecimiento. Según las estadísticas, los últimos días, la concurrencia al mercado ha ido en descenso.
Los trabajadores del centro de abastos se encuentran muy preocupados por los bajos ingresos que perciben últimamente. Esto no permite que se dé la reactivación económica por completo en su sector.
Ramos declaró que se está respetando el protocolo de bioseguridad y que, justamente por las medidas dictadas por el Ejecutivo, el mercado se vio obligado a reducir el horario de atención. Los días jueves, viernes y sábado trabajan desde las 6:00 a. m. hasta las 3:00 p. m., y el domingo desde las 6:00 a. m. hasta la 1:00 p. m.
Asimismo, la representante señaló que las restricciones sanitarias afectan a los comerciantes, pues ha ocasionado que la afluencia baje. Esto provocó un decrecimiento del 60 % en las ventas.
«Debido a que la situación económica se ha estado dando de manera esporádica y por algunas restricciones que ha dado el Gobierno, ellos se miran afectados en la venta de sus productos», mencionó la administradora.
La trabajadora del mercado resaltó que se cuenta con menos del 40 % de aforo en el centro de abastos. Además, puntualizó que tienen permitido solo el 50 % de su aforo, lo cual significaría 2000 personas, número que no se ha alcanzado.
Finalmente, Patricia Ramos indicó que solo los trabajadores que ofrecen productos hidrológicos (pescados y mariscos) alcanzaron un 60 % en sus ventas, mientras que otros sectores no logran comercializar sus productos a falta de usuarios.