La ex primera dama Nadine Heredia abandonó el Perú en la madrugada de este miércoles rumbo a Brasil, horas después de ser sentenciada junto al expresidente Ollanta Humala a 15 años de prisión por lavado de activos.
Su salida se produjo luego de que la presidenta Dina Boluarte autorizara un salvoconducto que permitió su asilo en territorio brasileño, en una decisión que ha encendido el debate político y legal en el país.
Heredia partió desde la embajada de Brasil en Lima a la 1:50 a. m., escoltada por una comitiva oficial. Poco después, a las 2:20 a. m., el grupo arribó a una base militar donde la esperaba una aeronave de la Fuerza Aérea Brasileña enviada expresamente por el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
La ex primera dama viajó acompañada por su hijo menor y ya se encuentra en Brasilia, según confirmaron fuentes diplomáticas.
Mientras Heredia se acoge a la protección del asilo político, su esposo, Ollanta Humala, será internado en el penal de Barbadillo para cumplir su condena.
El caso de los Humala-Heredia, relacionado con el presunto financiamiento ilícito de sus campañas políticas, culmina así con un giro diplomático inesperado que deja profundas interrogantes sobre la separación de poderes, el respeto a las sentencias judiciales y el papel del Ejecutivo en decisiones de alto impacto político.
