Al parecer los problemas parecen no cesar en nuestro país. Ante el alza de los precios del combustible, la carencia de fertilizantes, la suba de productos de la canasta básica de la población y los cambios constantes de los titulares de las carteras ministeriales. Los cuales continúan generando una alarmante preocupación en la población peruana.
Tanto es así, que uno de los sectores, que no dudo en alzar su voz de lucha ante la situación fueron los transportistas de carga pesada, los cuales piden al gobierno, la restitución del transporte de mercancías como servicio público, además de la reducción en el precio del diésel. Seguido de solucionar la competencia desleal que consideran existe por parte de sus similares bolivianos y ecuatorianos. Y también exigen, la regulación de peajes, luego de la revisión de los contratos con las concesionarias, entre otros reclamos.
El 21 de marzo, los transportistas de carga pesada, anunciaban una huelga indefinida, la cual sería llevada a cabo 7 días después. En aquella oportunidad, el vicepresidente del Sindicato de Transportistas de Carga Pesada de Arequipa, Magno Salas, indicaba que los trabajadores se sentían engañados por el gobierno y pedían igualdad de condiciones. Esto, a raíz, de la vigencia de una norma emitida en diciembre del 2021, la cual ordena la cobranza de un nuevo impuesto, lo que perjudica al sector y a la población en general.
Por ello, el 28 de marzo, los transportistas, acataron la medida de paralización, bloqueando con sus unidades la vía de Evitamiento a la altura del grifo Gamarra en el distrito de Cerro Colorado, dando inicio a una huelga indefinida a causa del alza en el precio del combustible. En dicha oportunidad, la medida de lucha fue acatada por las regiones de Cusco, Puno, Juliaca y Abancay, además de otras regiones del país.
El panorama para el cuarto día de paralización, exactamente el 31 de marzo, parecía ser incierto para varias personas que se quedaron varadas a la espera de realizar un transbordo para ingresar a la ciudad.
Algunas personas aseguraron estar más de una hora en el km 48. Efectivos de la Policía Nacional del Perú llegaron hasta la vía para evitar disturbios entre los manifestantes y la población varada. En dicha oportunidad, varias ciudadanos desconocían el paro de transportistas y la toma de la vía por parte de los manifestantes.
Sin embargo, ellos no fueron los únicos perjudicados, ya que varios negociantes varados ofertaron sus productos perecibles a la población. Unos comerciantes ofrecieron cincuenta plátanos por S/14, a fin de evitar que se descompongan y representen una pérdida para sus bolsillos.
El 1 de abril, siendo el quinto día de paro indefinido de transportistas de carga pesada, el jefe de la Oficina de la Defensoría de Arequipa, Ángel María Manrique, llegó al km 48 para dialogar con los manifestantes.
Posteriormente, ante la manifestación de más de tres días, los transportistas tuvieron diversas reuniones con miembros del poder ejecutivo por varios meses. Donde según indicaban, no se llegaban acuerdos beneficiosos para ambas partes.
Ante ello, el 20 de junio, distintas organizaciones vinculadas al sector agrícola y transporte ya anunciaban previamente un paro nacional para el lunes 27 y martes 28 de junio, como medida de protesta por la falta de apoyo del Gobierno del presidente Pedro Castillo. Todo ello por el alza de precios de fertilizantes, la crisis alimentaria y la segunda reforma agraria y la suba de combustibles.
El 22 de junio, Javier Corrales, representante del gremio, mencionaba la postergación de la paralización nacional, para el 18 de julio. Según indicaba, dicha medida era para tener un mes más, para llegar a concretar acuerdos con los transportistas.
Sin embargo, a horas de mañana del lunes 27 de junio, se llevó a cabo el primer día de paralización del sector transporte de carga pesada, en la ciudad de Arequipa. La protesta inició con el apagado de motores en la cochera del sindicato de camioneros de la ciudad. Seguido de una marcha rodante hasta llegar a las inmediaciones del Km 48, al promediar las 12 del mediodía, donde dicha manifestación se radicalizó, con el bloqueo de vías en señal de protesta.
Indicaban que no había un motivo de peso para posponer la paralización, para el 18 de julio, esto en respuesta a las declaraciones de Corrales. .“No hay una razón para postergar el paro, ya que nuestros pedidos son los mismos”, señaló, Fernando Fuentes, vicepresidente de la unión nacional de transportistas. Por otra parte, José Valdivia Oviedo, representante del GTC base Arequipa, señalaba que Javier Corrales no los representa.
Continuando en pie de lucha, la marcha continuo también el día martes 28 de junio. En son de una protesta pacífica. Sin embargo, las vías de la Panamericana Sur, estuvieron bloqueadas. A muy tempranas horas, el gremio de transportistas, dio una tregua de una hora, tiempo que permitió el ingreso y salida de vehículos que transportaban productos perecibles de la canasta básica.
Ante las especulaciones de generar disturbios, con la quema de llantas; el secretario general de los Transportistas camioneros de Arequipa, Teófilo Sánchez, recalco que la protesta se viene dando de manera tranquila, sin generar disturbio alguno. Ya que no quieren ser vistos como vándalos.
Reiteradas veces, los dos días que va de la paralización, el gremio de transportistas, señalan que están buscando que los problemas del alza de combustibles, se resuelvan de manera concreta. Puesto que, a lo largo de diversas conversaciones, aún no se logró llegar a un acuerdo.
A este segundo día de paralización, también se sumaron los miembros de construcción civil. Los cuales exigen el cierre del Congreso. Además, los manifestantes también mostraron su molestia por el alza del precio de los productos de primera necesidad y del combustible.
Por ello, también la mañana del 28 de junio. El sindicato de Trabajadores de construcción civil, se desplazó desde el puente Añashuayco, hasta la Plaza de Armas de la ciudad. En medio de arengas, bubuselas y pancartas. Los trabajadores de construcción civil, efectuaron una multitudinaria movilización. Los cuales exigían el cierre urgente del congreso, ya que consideran que la entidad está pasando por encima de la población y de sus derechos.
“Estamos cansados de congresistas corruptos, que solo sacan leyes para su beneficio, el pueblo es pisoteado, seguimos con una crisis política que beneficia solo a los ricos, olvidándose de los pobres”, mencionó una de las integrantes de la marcha.
El clamor del sindicato de trabajadores no se vio apaciguado por la inclemencia del sol, todo lo contrario. Ya que en conjunto mostraban su rechazo al congreso. Los cuales señalaban que están luchando por el pueblo , para que no se muera de hambre. Donde le pedían a Pedro Castillo , que saque decretos de urgencia, para enfrentar la crisis económica que azota el país.
En dicha manifestación, también se hicieron presente, los representantes de las rondas campesinas. “Estamos hartos de que no haya estabilidad económica y política , no hay nada bueno de parte del congreso”, señaló, Claudia Aguilar, coordinadora regional de las rondas campesinas.
Los manifestantes señalaban, que el pueblo peruano siempre ha sufrido la indiferencia por parte del gobierno. Ya que no se hace nada para frenar la pobreza del país y actualmente la crisis del alza de precios de los alimentos y combustible. Referían, también, que el sueldo básico no alcanza, más aún que ahora todo ha subido de precio.
“El congreso es el enemigo del pueblo, a costillas del pueblo ellos ganan sus sueldos, únicamente tienen intereses propios y quieren hacer bicameralidad, el congreso no nos representa”, señaló una de las manifestantes. La cual fue ovacionada por los demás integrantes de la manifestación, en señal de apoyo.
El panorama parece ser incierto en nuestra ciudad. La población está recurriendo a realizar manifestaciones para ser escuchados por las autoridades del país. Se encuentran cansados de las injusticias e inclemencias que pasan diariamente. Refieren que las autoridades trabajen adecuadamente a favor de la población en general. Ya que si un sector se ve afectado, este será seguido por una cadena que afectará a otros sectores consecutivamente. Sin embargo, no sabemos que ocurrirá el día de mañana.
Por: Aydee Mamani Ortega