Las micro y pequeñas empresas (mypes) en Arequipa se encuentran entre los grupos económicos más afectados por las protestas sociales que tuvieron lugar entre diciembre de 2022 y febrero de este año. Según un balance realizado por representantes del sector, alrededor de 5000 microempresas se han visto obligadas a cerrar, muchas de las cuales han pasado a formar parte del sector informal.
Abel Dongo, coordinador regional de Mypes Unidad del Perú (MUP) en Arequipa, señaló que la crisis social ha tenido un impacto directo en la economía de los microempresarios, debido a acciones como el bloqueo de vías, ataques a propiedad pública y privada, así como la incertidumbre en las inversiones del sector privado. Entre los sectores más afectados se encuentran el retail, la industria gráfica, el sector textil, la hotelería, la gastronomía y el turismo.
Dongo afirmó que, según el análisis del MUP, al menos el 50% de los microempresarios que han quebrado no han vuelto a emprender, mientras que el porcentaje restante ha tenido que recurrir al sector informal. Muchos de ellos se han convertido en taxistas o vendedores ambulantes, y algunos buscan trabajos temporales para asegurar ingresos mínimos.
Protestas también generó desempleo en microempresas
La crisis social no solo perjudica a los emprendedores, sino que también afecta a los empleados que trabajan en estas microempresas. Dongo explicó que, en promedio, cada microempresario tiene entre 5 y 10 trabajadores que quedan desempleados tras el cierre de los negocios. Además, el cierre de estas microempresas ha resultado en una disminución de ingresos fiscales para el Estado, lo que afecta el desarrollo de la región.
El presidente de la Asociación de Mypes Gráficos de Arequipa, también mencionó que las consecuencias de las protestas continúan afectando las ventas del sector. Por ejemplo, las imprentas han experimentado una disminución del 60% en sus ventas, lo que ha llevado a la quiebra a muchos de sus miembros.
Graciela Nayhua, representante de las Mypes en Arequipa ante la Agencia Regional de Desarrollo (ARD), destacó que durante las protestas se registraron pérdidas económicas diarias superiores a los 2.5 millones de soles. Estas manifestaciones ocurrieron durante campañas comerciales importantes, como la temporada navideña y la campaña escolar, lo que arruinó las inversiones de emprendedores en los sectores textil y de calzado.
Ambos líderes coinciden en que el apoyo del Estado para la recuperación de las microempresas es insuficiente, y programas como FAE-Mype y Con Punche Perú no son adecuados para enfrentar la situación. Además, las dificultades para acceder a nuevos créditos agravan la situación de las microempresas.
Comerciantes piden que las protestas sean pacíficas
Ante estas circunstancias, los líderes hacen un llamado a la población para que las movilizaciones sean pacíficas, ya que temen nuevos impactos económicos antes de importantes campañas comerciales como Fiestas Patrias y el aniversario de Arequipa. Si bien respetan el derecho a protestar, consideran que estas acciones pierden legitimidad cuando afectan a otras personas.
