El administrador de la NASA, Bill Nelson, declaró en una sesión informativa que China es el verdadero competidor en la nueva carrera espacial hacia la Luna. Estas declaraciones surgieron en medio de los preparativos para el lanzamiento de la primera sonda rusa hacia la Luna desde 1976. Aunque Nelson deseó “la mejor de las suertes” a Rusia en su próximo lanzamiento, enfatizó que China es el competidor más significativo en esta nueva era de exploración espacial.
Bill Nelson comparó el controvertido reclamo de China sobre las islas Spratly con la posibilidad de que China supere a Estados Unidos y sus aliados en el desarrollo de una base lunar. Nelson manifestó su preocupación de que China pueda establecer su dominio en la Luna, similar a cómo ha reclamado territorios en el Mar de China Meridional.
Las misiones Artemisa de la NASA tienen como objetivo llevar a los humanos de regreso a la Luna, específicamente al polo sur lunar, donde se encuentra hielo que podría proporcionar agua para futuras misiones espaciales. Nelson destacó que la competencia es realmente entre China y Estados Unidos, y enfatizó la importancia de proteger los intereses de la comunidad internacional en esta nueva fase de exploración espacial.
Rusia dejo de ser u rival
En contraste, Nelson mencionó que Rusia, aunque está enviando la sonda Luna-25 a la Luna, no es un rival significativo en términos de llevar tripulación a la superficie lunar. Nelson subrayó la colaboración histórica entre Estados Unidos y Rusia en la exploración espacial, pero señaló que actualmente no ve a Rusia como una amenaza en la carrera lunar.
Estas declaraciones podrían influir en la asignación de presupuesto a la NASA por parte del Congreso de Estados Unidos, ya que la agencia busca asegurar los recursos necesarios para competir y mantener su liderazgo en la exploración espacial, especialmente frente a China.
La sesión informativa de Nelson tuvo lugar después de que la tripulación de Artemisa II completara un entrenamiento con el equipo de búsqueda y rescate, como parte de los preparativos para la próxima misión lunar.