La nueva normalidad se concretó en China, dado que los simpatizantes del Wuhan Zall, ubicado en la ciudad donde se originó el coronavirus, pudieron asistir por primera vez a un partido de fútbol desde el inicio de la pandemia para ver el choque frente a Beijing Guoan por la novena fecha de la Superliga.
Los fanáticos locales abandonaron la capital regional de China para trasladarse unos 750 kilómetros al este, hacia Suzhou, en la provincia de Jiangsu, donde se permiten encuentros con un número limitado de audiencia.
“Los fanáticos de Wuhan Zall podrán ver a su equipo a nueve meses de la última vez que lo alentaron” subrayó el diario Corriere dello Sport de Italia. A finales de enero de este año, Wuhan, con 11 millones de habitantes, fue la primera ciudad del mundo en ser bloqueada por el virus que afecta al planeta.
Una investigación confidencial del gobierno chino identificó que el primer caso de Covid 19 en el planeta fue una persona de 55 años en Wuhan, el 17 de noviembre de 2019. A la espera de la vacuna que permita concluir con la pandemia, en el país donde todo comenzó los simpatizantes pudieron acudir a un espectáculo deportivo.
El partido concluyó 2 a 2 y el empate no le sirvió a ninguno, dado que ambos son aspirantes a la cima del certamen que tiene al Shanghai SIPG como único líder con 20 puntos, seguido por el Beijing Guoan, con 18 y Wuhan Zall, con 16.
