En los exteriores del Consejo Regional de Arequipa, padres de familia exigieron la aplicación de la modalidad semipresencial entre gritos y pancartas. Sin embargo, algunos docentes solicitan no aplicar esta modalidad, pues aluden a la falta de garantías para evitar contagios por la COVID-19.
Los padres de familia del Centro Especial Polivalente Arequipa piden el dictado de clases semipresencial porque consideran que la enseñanza virtual no es óptima para sus hijos. Adjuntado a la petición, los progenitores exigen la implementación del protocolo de bioseguridad, aunque, de todos modos, signifique un riesgo para los alumnos y la plana docente.
«Mi hija tiene hipoxia, necesita terapia y los profesores tienen experiencia de cómo tratar a los niños. No como estar directamente con los niños», manifestó un padre de familia. Además, el grupo de progenitores señaló que se presentan problemas de conectividad de manera constante en la educación remota. Consecuentemente, el dictado resulta insatisfactorio e incompleto para sus menores. Inclusive, algunos ciudadanos declararon que no cuentan con el servicio de internet o un equipo adecuado para la educación virtual.
Contrariamente, docentes del Sindicato Magisterial Regional Arequipa (Simag) denunciaron que volver a las clases semipresenciales sería un atentado contra su salud. De igual manera, los profesores señalaron que ser voluntario no garantiza la seguridad ni protege la salud ante la COVID-19, así sean atendidos en centros de salud o sean vacunados; el colectivo considera la semipresencialidad muy riesgosa.
Finalmente, el gerente regional de Educación, Raúl Sánchez, estaría evaluando una interpelación de veinte preguntas sobre el manejo del sector en la región para tomar una decisión ante ambas posiciones.
