El Poder Judicial ha ratificado la validez del pedido para levantar el secreto de las comunicaciones en el caso de dos teléfonos celulares que pertenecieron al fallecido expresidente Alan García. Esta decisión fue confirmada por la Tercera Sala Penal de Apelaciones Nacional, respaldando así una resolución previa emitida por el Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria.
La resolución original había sido apelada por los familiares del fallecido exmandatario, incluyendo a su viuda Pilar Nores y sus hijos Josefina, Carla y Alan García. A pesar de la apelación, la decisión de levantar el secreto de las comunicaciones se mantuvo firme.
El levantamiento del secreto de las comunicaciones de estos dos teléfonos es parte de una investigación más amplia sobre posibles irregularidades en la concesión de obras de infraestructura a empresas constructoras brasileñas. Estas investigaciones buscan esclarecer supuestos actos de corrupción en la adjudicación de contratos públicos.
En concreto, las investigaciones se centran en presuntos pagos indebidos relacionados con la construcción de la Línea 1 del Metro de Lima y los tramos 2 y 3 del corredor vial de la Carretera Interoceánica Sur. Estas obras están bajo sospecha de haber involucrado sobornos y otros actos ilícitos.
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