El partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN) liderado por Marine Le Pen ha logrado una importante victoria en la primera vuelta de las elecciones legislativas en Francia. Con más del 34% de los votos, el RN y sus aliados se posicionan como favoritos, aunque deberán esperar a la segunda vuelta el 7 de julio para saber si alcanzan la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional.
La coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) consiguió entre el 28,5% y el 29,1% de los votos, mientras que la alianza centroderechista del presidente Emmanuel Macron obtuvo entre un 20,5% y un 21,5%, según las primeras estimaciones de Ifop e Ipsos. La victoria del RN representa un cambio significativo en el panorama político francés y podría tener repercusiones importantes para la Unión Europea y la política exterior de Francia, especialmente en relación con Ucrania y Rusia.
El sistema electoral francés, que permite la entrada de dos o más candidatos a la segunda vuelta según los resultados de cada circunscripción, mantiene el desenlace final incierto. La participación en estas elecciones ha sido notable, con un 59,39% de votantes a las 17H00, lo que refleja la percepción de la importancia histórica de esta votación.
Marine Le Pen, cuyo partido ha trabajado en moderar su imagen en la última década, se enfrenta ahora al desafío de consolidar su victoria en la segunda vuelta. El presidente Macron, bajo presión para alinear su estrategia con las fuerzas de izquierda, ha insinuado que su consigna será no votar por los “extremos”, en referencia tanto a RN como a la izquierda radical de La Francia Insumisa (LFI).
Una segunda vuelta decisiva
El presidente Macron, cuyo mandato concluye en 2027, adelantó las elecciones tras la contundente victoria de RN en las elecciones europeas en Francia. Este movimiento estratégico ahora lo pone en riesgo de compartir el poder con un gobierno de oposición, justo antes de los Juegos Olímpicos de París. Si el RN logra la mayoría absoluta en la segunda vuelta, su joven líder emergente, Jordan Bardella, de 28 años, podría ser postulado como primer ministro.
El RN ha centrado su campaña en limitar la inmigración, imponer la autoridad en las escuelas y reducir la factura eléctrica de los hogares, entre otras medidas. Sus oponentes han alertado sobre los riesgos de un gobierno de extrema derecha, destacando los comentarios racistas y antisemitas del fundador del partido, Jean-Marie Le Pen.
En definitiva, el resultado de la segunda vuelta será crucial para definir el futuro político de Francia y su impacto en la política europea.
