El fiscal José Domingo Pérez lanzó una seria advertencia tras ser suspendido por seis meses del Equipo Especial Lava Jato: teme que los documentos de sus investigaciones incluyendo el caso Cócteles, puedan ser alterados o incluso desaparecer.
Pérez denunció que la Autoridad Nacional de Control (ANC) del Ministerio Público no solo lo suspendió, sino que además le prohibió ingresar a su oficina, impidiéndole retirar sus pertenencias personales, supervisar el inventario de los expedientes y realizar el traspaso formal del cargo a quien lo reemplace.
“Lo habitual sería que me permitieran hacer la entrega de cargo, el inventario, pero a la persona que sea designada en mi reemplazo, porque las investigaciones y los expedientes tienen pruebas que son sensibles”, explicó en declaraciones a RPP.
El fiscal advirtió que la falta de este procedimiento pone en riesgo la integridad de documentación clave.
“Pueden comenzar a alterar la documentación que está en los expedientes. Ahora no hay quien jefature la oficina”, alertó.
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Pérez también reveló que desconoce quién ha sido designado para sucederlo y cuestionó que la medida se haya ejecutado sin prever la seguridad de los documentos.
“Espero que se hayan tomado las medidas necesarias para cautelar la seguridad de esa oficina”, expresó.
La suspensión de Pérez se da en un momento clave de sus investigaciones, pues —según reveló— estaba próximo a firmar la acusación fiscal en el caso Cócteles.
